CREACIÓN PASO A PASO: Tintas.

Soy novato en esto del entintado, y el lector avispado se habrá dado cuenta. Todavía estoy en esa fase en la que no consigo el efecto que estoy buscando, a veces por falta de pulso y habilidad, y otras por no tener el instrumento adecuado.

He probado con una buena cantidad de rotuladores, grafos, Pilots y similares en todo este tiempo, y tras cerca de cien páginas entintadas (pocas comparadas con cualquier otro artista, seamos sinceros) me he convencido a mí mismo de que las mejores herramientas siguen siendo las más antiguas: plumilla y pincel.
La Hunt 102 Crow Quill es la plumilla estándar del entintador yanki, y la de mayor aceptación. Permite variabilidad en el trazo, y líneas finísimas cuando son necesarias. Es muy barata, y puede adquirirse en cajitas de 12 unidades en varias tiendas online. Eso sí, es difícil de dominar. Os recomiendo un excelente tutorial que podéis encontrar en The Gnomon Workshop a cargo de Joe Weems, uno de los mejores entintadores de comic-books y compañero habitual de David Finch. Da muchos consejos útiles sobre cómo trabajar la pluma. A él le costó tres años dominarla, así que... ¡paciencia!

En cuanto a la tinta, la empleada por excelencia es la Higgins Black Magic, aunque la Windsor&Newton también funciona bien. Ambas son tinta china (India Ink para los angloparlantes, curiosamente.)


Entintar con pincel es otra buena opción, pero el nivel de dificultad es mayúsculo. El mejor libro que he encontrado para aprender es el que mencioné en la primera entrada, a cargo de Gary Martin y Steve Rude, y el mejor pincel que podéis adquirir es un Windsor&Newton de la Serie 7, del grosor que necesitéis. Están fabricados con pelo de marta, y no bajan de 20 Euros, pero merecen la pena, ya que si los tratáis bien, siempre vuelven a su forma original y no se despeluchan. Yo personalmente sólo los uso cuando tengo que cubrir grandes áreas, y en ocasiones, para trazar líneas que definan el cabello. Mi pulso todavía no está entrenado para acometer proezas mayores...


Un sustituto aceptable del pincel es el Pentel GFKP, un pincel recargable pensado para caligrafía japonesa que es toda una maravilla. Fácil de encontrar, y un poco más económico que comprarse varios pinceles. No es un mal instrumento para iniciados.


Como sustituto de la pluma, lo más apañado son los rotuladores Pentel Stylo JM10 (de trazo variable) y los UniPin (en diámetros de 0.05 a 8). El único inconveniente que veo a usar rotulador es que tenéis que estar muy atentos si la tinta se va gastando, y reemplazarlos enseguida por otros. A la larga,  el rotulador es la opción más cara, y no ofrece resultados tan espectaculares como la pluma, aunque a mí me dió mucha seguridad en el trazo como herramienta de inicio.

Para correcciones y determinados efectos, el gouache blanco suele funcionar muy bien. También tengo un líquido corrector japonés que tiene una fórmula menos grumosa que el famoso Tip-Ex, y que me ofrece mejores resultados, el Misnon.

Por último, para dar sombras a los dibujos que posteriormente serán coloreados, puede emplearse pincel con tinta diluida en agua, o unos rotuladores Copic. Los Copic son fantásticos, ya que al tener una base acuosa, se pueden mezclar unos con otros y realizar degradados de color. Si el papel es resistente y satinado, se absorben rápidamente y no levantan la más mínima pelotilla aunque pases por encima varias veces. Yo recomiento agenciarse una caja únicamente de grises para ir probando mezclas. Posteriormente, el colorista los transformará automáticamente en tonalidades del color que vaya encima. G.J. Jones, el excelente portadista de la serie 52 de DC Comics los emplea muy a menudo.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Donde obtuviste el corrector Misnon :O??? Saludos!!!

Iñigo Aguirre dijo...

En Japón... pero prueba a ver si lo venden online. Si no lo encuentras, el gouache blanco de Pelikan es también buena solución... Saludos!